domingo, 12 de agosto de 2012

miércoles, 28 de marzo de 2012

El diario de una perra Capitulo I

Siempre el hombre equivocado

Pocas veces conoces hombre que te interesen, que te despierten ganas de comértelos. Y con comértelos me refiero a por los ojos capturar cada imagen de ellos, por la boca lamer y pasar cada fluido suyo esperando que algo se quede por siempre adentro tuyo, que sus palabras te penetren el cerebro. Escasas son las ocasiones en que alguien te cautiva y te gusta completo. Pero un día casualmente conoces al hombre que te quita el aliento. Te gusta su risa, sus gustos, te enamoras de su música, te derrites cuando te toca, te mojas de solo recordarlo. Siempre resulta el hombre equivocado.
Pronto sabes que no es tuyo, que con el no tienes nada más que el momento que vives, pueden ser varios motivos por los cuales nunca tendrás una historia con el, resulta que tiene una novia a la que ama y llevan muchos años juntos...no... nunca la va a dejar por ti, puede ser que ella sea mejor que tu, que tu reputación este tan dañada que ni siquiera lo pensaría, en general no eres suficiente, la verdad nunca has preguntado o reclamado, sabes que no tienes derecho a nada con el, y te callas mientras tejes hipótesis que junto con la realidad te hacen sentir peor que mierda de la calle. Adiós autoestima, adiós dignidad, bienvenida la locura y el dolor. El problema esque lo crees mejor que tu.
Sin embargo si le gustas lo suficiente como para acostarse contigo múltiples veces y enseñarte sus películas favoritas, compartirte cigarros en la cama y la música que compone. Puedes sentir que contigo cumple las fantasía que ni siquiera mencionarla a ella o.... te lo imaginas, te llenas la mente de preguntas de ese tipo, no obstante te sigues deslizando en su cama y besándole el cuello como si fuera un dios. Te abrazas a los cocodrilos. Vives fallando en el intento de no enamorarte por que sabes que todo terminaria en una obsesión, después vas a querer tatuarte su nombre, irte a vivir a Alaska o pegarte un tiro en la cien.
Un buen día aparece algún sujeto que te ha llamado la atención y te dices que eres libre.
El tiene novia no tienes por que respetarlo te autoconvences, pero sabes que no eres así. Si le quisiste dar celos erraste. Ahora te sientes y el te hace sentir como toda un puta. Cuando te arrastras en la disculpa te contestó -No importa-  -No eres nada mio- y aunque es lo más cierto del mundo fue ácido en las entrañas, el también es un sadico de mierda. Y ahora mueres por recuperar algo que nunca tuviste y sabes que  reptaras por el piso con tal de tocar esos labios otra vez. Volvemos al ciclo de autodestrucción en el que buscaste a alguien que no puede estar contigo y para justificarlo, soportarlo y no sentirte tan pendeja te metiste con otro.  Ahora hay que buscar en el fondo de tu alma la fuerza para olvidarlo, esperando que el no te tiente por que siempre has estado en sus manos.
Hay una peor opción... que no tenga novia,  por que entonces simplemente  es que tu no lo convences,  en este caso vas a escuchar las mejores justificaciones de por que no es tu culpa, pero todo el tiempo sentirás que si. Puede que trates de mejorarte a ti misma, te mates de hambre, cortes el cabello, aprendas de lo que a él le gusta, compres regalos hermosos para el, aquí ya vas que vuelas para borderline. Al final... el final predestinado, él se cansó de ti, de que pidas más  de lo que quiere darte o de que trates de incrustarte en su vida.
En cualquiera de los casos anteriores te arrastras de dolor por que sabes que ni con todo el esfuerzo lo lograste y te ardes contigo misma por haber desperdiciado tu tiempo, tu dinero, tus noches. Pero no es un desperdicio, piensa que te llevas la mejor parte y el culero es el, hay que escogerlos mejor...ya no meterte en misiones suicidas, solo por que encontraste un hombre que te gusta en todo, no es garantía de que vas a poder. Y aunque también te gusta el sufrir tantito hay que retirarse cuando ya se arriesga la sanidad mental <3 digo la poca que tenemos <3




martes, 27 de marzo de 2012

El tren..

Y aquí estamos otra vez atorados entre las cosas que hicimos de las que no nos arrepentimos y las consecuencias de guiarnos por el deseo, de seguir esa fuerza que empuja hacia otro cuerpo y otros labios. Aun sabiendo que subiendo a ese tren vas a destrozar con las ruedas lo único e importante en tu vida, vas a recojer pedazitos del que amas, de lo poco bueno que has encontrado en la vida. Sin embargo te subes a un tren con pinta de no tener frenos e irse sin paradas a la chingada. Cuando pones un pie dentro acabas con las pocas cosas que te hacen real, estas consiente del grado el daño y la profundidad de la herida. Pero igual lo haces por que en esa noche, en ese fragmento de realidad lo quieres y lo deseas. Arriesgandolo todo cierras los ojos y saltas, podrías morir, mutilarte, nada importa igual lo haces.
Tomas el riesgo, pones la bala en el tambor esperando ganar algo más grande de lo que pierdes al subir, por que no logras lidiar con la insatisfacción de tu realidad por que a pesar de ser un contenedor de defectos... tu lo quieres perfecto, buscas la historia de tu vida pues no estas seguro de haberla vivido todavía.
Pierdes por nada e intentas recuperar, darías todo por reparar el daño, tomas un cuchillo y te cortas un pedazo para hacer un parche de piel tratando de cubrir el agujero, pero ya no depende de ti, que te otorguen el indulto. Ahora rezas por que esa persona vea en ti más profundo que la mierda en la que te sumergiste. A veces cuando el que arrollaste realmente te ama lo puedes superar, eso me han dicho por que hasta hoy no estoy segura de que alguien me haya amado. Normalmente las personas se dan la vuelta al descubrir la bestia que vive adentro.
Algo que nunca podre explicar es por que te duele más a ti que al atropellado.
En ocasiones solo pierdes en tu mente por que no tenías nada, solo todos las historias de tu imaginación en un mundo paralelo. De todas maneras sea real o no lo que perdiste, el dolor de dobla.
Pero igual lo harías otra vez, tomarías el riesgo si hay la mínima posibilidad de que este tren sea el de tu pelicula. Sabes que  amas cada segundo antes de tomar el tren, por fin sientes que esta pasando algo en tu vida, aun disfrutas los recuerdos de viaje antes de descarrilarte. También puede ser que simplemente no eres lo que las personas sanas consideran "una buena persona".